Hoy también es importante.

Hoy es el último día del año, pero no por eso deja de ser importante. Creemos, casi en todos los sentidos de la vida, que el último no vale la pena. Creemos que el último vaso limpio no vale la pena, hasta que lo necesitamos. Creemos que el último dulce que queda en la bolsa no vale la pena, hasta que lo queremos para nosotros.

Hoy, el último día del año viejo creeríamos que no es importante, hasta que, algo nos sucede en ese día. Que nace un hermanito, que nos regalan algo para divertirnos, o que vamos de viaje. Recordemos, el último también es importante.

Siendo mejores.

Cuando uno es pequeño se pregunta ¿Cómo puedo yo predicar el evangelio de Jesucristo para que otros lo conozcan y lleguen a sus pies, si soy pequeño?. Tenemos la idea que sólo el pastor, o nuestros papás, o nuestros hermanos mayores pueden predicar.

Siendo pequeños, Dios no nos va a pedir que vayamos a un parque con micrófono en mano y la biblia en la otra, para leer versículos y versículos para ver quien nos cree. Pero sí nos pedirá que cumplamos con nuestras tareas en el colegio, que seamos bien portados en casa, que demos ejemplo con una vida sana... siendo mejores cada día, esa es nuestra predicación ahora.

Un nuevo año, un nuevo propósito.

Estamos a las puertas de un nuevo año, en éstos tiempos es cuando escuchamos las promesas y las metas de muchas personas PARA EL AÑO QUE VIENE. Decimos que dejaremos esto o que haremos lo otro.

Cuando iniciamos, si es que lo hacemos, lo hacemos con mucho entusiasmo pero conforme pasan los días lo vamos dejando. El creyente, nosotros, NO deberíamos esperar un nuevo año para hacer promesas, ni mucho menos dejar de cumplirlas. HOY es nuestro día de inicio.

Ayudemos a otros.

Cuando estamos cansados, cuando estamos que ya no aguantamos más, le pedimos ayuda a alguien a nuestra madre, a nuestro padre, a un hermano, o, a un amigo. Qué rico se siente cuando recibimos esa ayuda pues nos alivia.

Eso quiere decir que cuando otros nos piden ayuda, es porque están también cansados y necesitan de alivio. Ahora que estamos concientes de lo que esa ayuda significa para nuestras vidas, podemos estar también concientes de lo que significará para ellos que nosotros les extendamos la mano.

¿Quiénes eran los magos?

Conocemos como los "magos" a unos estudiosos astrónomos (no astrólogos) que conociendo las escrituras, supieron que la señal del Hijo de Dios mostraba el tiempo de su nacimiento. La religión nos ha dicho que eran tres y hasta da sus nombres. La biblia no menciona cuántos eran, ni cómo se llamaban, sólo menciona que llevaron tres presentes a Jesús, mirra, oro, e incienso.

Los astrónomos estudian los astros, y es una ciencia; los astrólogos, leen los astros y es una práctica satánica que Dios, por supuesto, no sólo desaprueba sino castiga.

¿Por qué nació Jesús en Belén?

José y María vivian en Nazaret, en los territorios altos de Galilea, pero en los días en que iba a nacer Jesús, Herodes decidió hacer un censo. Y como tanto José como María eran descendientes del Rey David, que era de Belén, entonces tuvieron que ir hacia esa zona.

Belén es una ciudad de los territorios de Judea. Por lo tanto José y María tuvieron que recorrer más de 140 kilómetros desde Nazaret hasta Belén. Algunas tradiciones dicen que lo hicieron montados en asnos, otras dicen que lo hicieron a pie.

La navidad.

Para muchos la navidad es una fiesta porque se reciben regalos, comida, dulce, bebidas, etc. Pero la verdad es que la navidad es una fiesta porque es el día en el que creemos nació Jesús.

El nacimiento de Jesús debería de ser nuestra fiesta, porque fue el día en que Dios nos envió al Redentor, nos envió a Aquél que había de ser nuestro Salvador. Pidamos a Dios que muchos más conozcan a Jesús, el Salvador, como nosotros lo conocemos para que de ahora en adelante ESE sea el motivo de las éstas fiestas.

Pablo, el apóstol de los gentiles.

Jesús eligió a doce apóstoles, a todos los mandó a predicar a los judíos, pero cuando ya había muerto Jesús, entonces escogió a Pablo, quien se llamaba Saulo y había nacido en Tarso, en Asia.

A Pablo, Jesús lo mandó a predicar a todos los que no eran judíos por ello se le llama el apóstol de los gentiles, porque le predicó sólo a gentiles.

¿Qué nos enseñan los evangelios?

Los cuatro evangelios nos enseñan la vida de Jesús, el por qué Jesús vino a la tierra, y cómo y por qué murió. En cada uno de los evangelios encontramos facetas de la vida de Jesús que nos sirven para conocerlo mejor.

Jesús, el hombre; Jesús, el poderoso; Jesús el Hijo de Dios; Jesús, el Redentor. Cuál es el camino que él siguió y que nos dejara marcado para que lo siguiéramos nosotros.

¿Cómo orar?

Ya hemos dicho en otras ocasiones que "orar" es "hablar" con Dios. Dios es nuestro Padre celestial. ¿Cómo hablamos nosotros con nuestros padres terrenales? De persona a persona, con preguntas y respuestas, con una conversación dinámica (o sea de ida y vuelta). No somos repetitivos.

Por ejemplo, nosotros no le decimos a nuestro padre. quiero un cuaderno, quiero un cuaderno, quiero un cuaderno. Le decimos: quiero un cuaderno. El pregunta ¿para qué?. Uno responde, para matemáticas. El pregunta, de cuadrícula ¿grande o pequeña?. Uno responde pequeña. Etc. No es una conversación repetitiva.

¿Qué es hacer una confesión de fe?

¿A qué se le llama una confesión de fe? Una confesión es declarar con nuestra boca y de voluntad propia nuestra culpa en algo. Y, la fe es declarar que creemos en algo o en alguien. Luego, una confesión de fe es simplemente, "declararle a Dios que sí creemos que el sacrificio que su Hijo hizo para salvarnos, lo creemos".

Jesús vino para salvar a todos aquellos que hagan una confesión de fe en él, y luego le sigan. Eso es lo que quiere que hagamos pues él quiere salvarnos.

Dios no necesita ayuda.

Muchas personas dentro de la iglesia estamos conscientes que hemos de dar testimonio de lo que Dios hace por y para nosotros. Y es por eso que se dan testimonios, o sea, les contamos a otros lo que Dios ha hecho por nosotros.

Pero, NUNCA debemos contar lo que no ha sido. Nuestro testimonio tiene que ser algo sencillo, pero verdadero. Dios no necesita que lo ayudemos contando grandezas, sólo quiere que contemos lo que nos sucedió, tal y como nos sucedió.

Amigos íntimos.

¿Quiénes son nuestros amigos íntimos? Los que saben nuestra vida. Y ¿Quiénes son los que saben o conocen nuestra vida?. Pues no son los que vemos muy de vez en cuando, sino los que vemos todos los días.

Solamente teniendo una relación personal y diaria con alguien, podemos llegar a ser amigos íntimos. Eso es lo que Jesús quiere con cada uno de nosotros. Entonces, ¿Qué estamos esperando para leer la Biblia, para orar, para platicar con él todos los días?

El Juicio delante de Dios.

Dios nos habla en la biblia que luego de que cada uno de los hombres viva, debe morir. Nadie escapa a la muerte. Pero también nos cuenta que luego de la muerte viene INMEDIATAMENTE un juicio para cada ser humano.

En ese juicio sacarán los libros en donde están escritas nuestras buenas y malas obras, y luego de un veredicto, o sea, de un estudio y comparación de los hechos buenos y malos, entonces se dará una sentencia o un resultado. Debemos vivir respetando las leyes de Dios para que ese resultado salga a nuestro favor.

Como si fuera para él.

En el libro de Colosenses en Pablo nos enseña una lección bien preciosa: "Todo lo que hagáis, hacerlo como para el Señor y no como para los hombres" (Colosenses 3:23).

Las obras que hagamos no las hagamos pensando o creyendo que las estamos haciendo para un hombre o una mujer, hagamos de caso que es a Jesús a quien servimos, y esa actitud, nos hará hacer todo con excelencia. Eso agradará mucho el corazón de Dios.

¿Qué significa ser bienaventurado?

Bienaventurado es ser dichoso. Dichosa se siente una persona que tiene no sólo lo que necesita, sino también lo que quiere. Para probarlo, podemos sustituir la palabra bienaventurado por dichoso en la parábola de las bienaventuranzas.

Dichos los pobres en espíritu, porque ellos verán a Dios. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados; Dichosos los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios... ¿Entendemos?

¿Qué es orar?

Desde el punto de vista del creyente, orar significa platicar con Dios, hablar con él. Cuando los discípulos le preguntaron a Jesús: Señor, enséñanos a orar. La respuesta del Señor fue: Cuando oréis NO HAGAIS VANAS REPETICIONES como hacen los gentiles. Los gentiles eran personas NO salvas, personas que NO conocían a Dios, y por lo tanto, NO sabían cómo comunicarse con Dios.

Por ello, Jesús quiere que platiquemos con él, que platiquemos con Dios, que platiquemos con el Espíritu Santo, no que hagamos vanas repeticiones que no nos dicen nada a nosotros ni a Dios.

Paso a paso.

Un pensador chino dijo en una ocasión a sus alumnos ¿Cómo se completa una caminata de mil kilómetros? Nadie de sus alumnos supo la respuesta, entonces él les dijo: La respuesta es sencilla, iniciándola con el PRIMER paso. Pues si usted no da ese primer paso jamás dará el último.

En los caminos de Jesús, nuestro Salvador, toda obra buena que podamos terminar también se inicia con un primer paso. Todos los días debemos prepararnos leyendo la biblia, orando a Dios, pidiéndole su bendición, para así, poder algún día terminar alguna obra que él nos mande realizar.

¿Qué nos cuentan los evangelios?

Los cuatro evangelios son escritos que nos narran la historia de la vida de Jesús, desde su nacimiento hasta su muerte. En esos cuatro libros, que son los que abren el Nuevo Testamento, podemos leer acerca de los padres adorptivos de Jesús, de su vida, de sus milagros, y de la forma como preparó a sus discípulos.

Podemos aprender la forma de vida que Dios desea que llevemos en ésta tierra, para luego cuando muramos, él nos lleve a su preciosa presencia, a los que le amemos y le sigamos en ésta vida.

¿Qué es el fin del siglo?

Cuando algunos leen lo que Jesús les dijo a sus discípulos en Mateo 24, piensan Jesús estaba hablando del fin del mundo. Muchas personas hoy en día creen y hasta predican que viene el fin del mundo. Pero no es eso lo que viene, ni fue eso lo que Jesús dijo que venía.

Los apóstoles le preguntaron a Jesús ¿cuándo será el fin del mundo?. Pero Jesús no les respondió eso, porque el sabía que lo que viene es un CAMBIO DE ERA O DISPENSACIÓN, no el fin del mundo. El fin del mundo será después de su reinado de mil años, eso es lo que nos enseña Apocalipsis.

La ascensión de Cristo.

Llamamos ascensión al evento en el cual Jesucristo fue elevado a los cielos en vida, por unos ángeles delante de sus discípulos, evento que vemos en el libro de los Hechos de los apóstoles en el capítulo 1 y versos 6-10.

Solamente de Enoc y Elías, en el Antiguo Testamento; y Jesucristo, en el Nuevo Testamento la biblia nos habla de que hayan sido llevados en vida a los cielos.

¿Qué es o qué significa el pecado?

Tener una buena relación con Dios es lo que TODO creyente debe anhelar. ¿Quién desea vivir en una casa en donde papi y mami se mantienen disgustados? ¿Quién desea vivir con un hermano que sólo pleitos es?

Dios desea que hagamos un hogar con El? Pero no quiere vivir disgustado con nosotros ni que nosotros estemos disgustados con El. La única forma para que esto suceda es que le obedezcamos. El mismo lo dijo: "Yo, deseo, más que sacrificios y ofrendas... obediencia" (Salmo 40:6). No obedecer a Dios es pecar.

El temor de Dios.

Cuando en la iglesia o en la casa nos hablan del TEMOR de Dios, no nos están diciendo que Dios es un ser al que tenemos que tenerle MIEDO.

Lo que nos están diciendo es que a Dios hemos de HONRARLO por ser no solamente un ser superior, sino el ser que es más superior que cualquier otra persona u autoridad que conozcamos. El es el dueño de todo y de todos, temerle no es tenerle miedo sino HONRARLO como el dueño de todo, hasta de nuestras vidas.

La transfiguración.

Se le llama así al evento que presenciaron los discípulos (no todos, sino sólo Pedro, Jacobo y Juan) cuando en el monte vieron su gloria.

En ese evento los discípulos pudieron ver realmente a Jesús como el Cristo, el Hijo de Dios hecho carne, y pudieron observar la gloria de la cual está revestido Cristo en el cielo, por eso querían quedarse allí a vivir (Mateo 17).

Daniel, el amigo de Dios.

¿Quién no conoce la famosa historia de Daniel el amigo de Dios, aquél que cuando no quiso obedecer a las órdenes de un rey impío, fue echado al foso de los leones y éstos no le hicieron nada?

Daniel se hizo amigo de Dios porque le oraba durante varias veces al día. Daniel se postraba al suelo y se ponía a glorificar a Dios tres, cuatro y cinco veces por día. Por ello llegó a ser amigo de Dios. Y cuando lo necesitó, Dios le ayudó.

Y Jesús lloró.

Jesús, cuando anduvo por ésta tierra tenía todos los sentimientos que un hombre puede tener, dicen las escrituras que cuando caminaba con sus discípulos se cansaba; que tenía sed; que tenía hambre.

En una ocasión, dice que Jesús lloró. Esto fue cuando estaba frente a la tumba de Lázaro su amigo fallecido. Sabemos que no lloró por Lázaro pues él sabía que le levantaría de los muertos, pero sí dice que lloró.

¿Qué significado tiene el Arca de Noé?

Todos sabemos que Dios ordenó hacer a Noé un arca, la cual conocemos como el Arca de Noé. Pero ¿Qué significado tiene?. Bueno, en un principio hemos de decir que el Arca fue el medio de "salvación" para Noé y su familia cuando el diluvio. Luego, en ella iban los animales que Dios le dijo a Noé que metiera, los cuales iban unos muy cerca de otros; y en tercer lugar sufrieron visicitudes por casi un año allí metidos.

El Arca pues, es una imagen de Jesús nuestro Salvador; es imagen de que todos los creyentes debemos vivir unos muy cerca de los otros; y que a pesar de las visicitudes que ésto conlleve llegaremos a tierra firme, por la mano de Dios.

Pedid, y recibiréis.

Jesús les dijo a sus discípulos en una ocasión: "Pedid, y recibiréis". Más adelante les dijo: "No recibís, porque pedíis para vuestros placeres".

Jesús desea que tengamos lo necesario, y quiere que se lo pidamos para dárnoslo. Pero se goza más cuando le pedimos que le de a otros lo que también necesitan. Eso es pedir no para nuestros placeres sino para los de otros.