Es muy importante que un hombre o una mujer que se dicen creyentes, trabajen. No se puede "dar" testimonio a los no creyentes, si primero no "somos" testimonio.
El trabajar para Cristo también es importante, porque el trabajo material nos da de comer, pero el trabajo espiritual nos lleva a la vida eterna. No por sí, sino porque es lo que agrada a Dios, después de haber reconocido a su Hijo como nuestro suficiente Salvador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario