Hay iglesias que dicen que hay pecados pequeños y pecados grandes. Pero delante de Dios no es así. Para Dios toda "desobediencia" es pecado, no dice si es grande o pequeña.
Para Dios matar a una persona es tan grande o tan pequeño el pecado, como cuando Moisés se enojó, y tocó dos veces la misma piedra en lugar de tocarla una para que saliera agua de ella. Ambas son desobediencia a la Palabra o la Ley de Dios. Pidámosle a Dios "gracia" para obedecerle siempre, y que esté contento con nosotros.
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